Si tienes dudas sobre qué se debe hacer ante una crisis de ansiedad, qué puedes hacer a nivel personal para disminuirla o si puedes recaer después de un tratamiento, aquí te compartimos lo que recomiendan los especialistas.
Por: Mosaico Medios
Para la ansiedad, sobre todo frente a las crisis, lo primero es no pelearse con ella, aceptarla, dejarnos sentir y entenderla para poder enfrentarla. Durante una crisis hay que hacer un ejercicio de respiración profunda y permitirnos observar lo que sucede, buscando la calma. El acompañante no debe intentar que reprima lo que siente, sino ayudarle a encontrar la tranquilidad e intentar no entrar en ese mismo pánico. Sin embargo, lo ideal para enfrentar este trastorno es seguir un tratamiento en forma por parte de un profesional de la salud mental.
Algunas recomendaciones generales para enfrentar la ansiedad:
Identifiquemos si realizamos un trabajo que nos gusta, ¿cómo está el clima laboral? ¿cómo es nuestra relación con los jefes? ¿cuánta es nuestra distancia de traslado y qué implica ésta? y hagamos éstas mismas preguntas enfocadas a la vida familiar, social y personal. Al identificar cómo se encuentra nuestra situación, en un ambiente laboral no controlado por nosotros por ejemplo, podemos buscar conductas adaptativas que sean más saludables y funcionales, podemos llevar nuestra propia asertividad en la relación con los compañeros y buscar el cambio en cómo nos manejamos con los demás, en lugar de intentar hacer cambios en los demás o en situaciones que están fuera de mi alcance. Una forma podría ser: poniendo límites concretos en nuestro horario y la cantidad de trabajo que realizamos.
Aunque ya se haya estado en tratamiento para la ansiedad, al regresar al mismo ambiente y repetir las mismas conductas anteriores, es posible recaer, aun cuando ya haya avance en el tratamiento pues se pueden retomar patrones que no se han terminado de sustituir. Ante el primer asomo de la presencia de ansiedad o la sensación ya conocida de algo que la va a desencadenar recomendamos acudir inmediatamente al médico psiquiatra o terapeuta recurrente para que brinde el apoyo necesario. Es normal tener altibajos y esto no nos debe de desanimar, sin embargo es importante tener presente que las crisis no se presentarán con la misma frecuencia bajo tratamiento. El tratamiento mismo es también un proceso de adaptación a un nuevo estilo de vida por lo que tomará tiempo y trabajo.
La familia representa el principal apoyo para los trastornos de ansiedad. Así también, los patrones sociales juegan un papel importante en la generación de ansiedad, incluso puede ser la desigualdad de género. La ansiedad es más frecuente en mujeres que en hombres y esta razón está asociada a ciertas actividades relacionadas con su rol y desempeño de actividades demandantes emocionalmente. Hay demasiadas exigencias sociales que cumplir y puede ser que la simple falta de organización de tiempo y actividades sea lo que genera mayor estrés. Todo ello debe ser revisado con apoyo de un especialista para determinar el tratamiento más adecuado.