Los trastornos alimenticios como la anorexia, la bulimia y la obesidad generalmente son comorbilidades de otros trastornos gestados en la autoestima, es decir, su trasfondo es emocional. Por ello, se deben atender desde el aspecto psicológico además del área nutricional.

Por: Mosaico Medios

La alimentación afecta directamente la salud mental de los jóvenes y viceversa, aspectos como la anorexia y la bulimia son comorbilidades de otros trastornos y generalmente se gestan en la autoestima. Si hay un trasfondo emocional detrás de un trastorno alimenticio se debe tratar la patología desde la base por la parte psicológica adicional al aspecto de la alimentación. La obesidad también puede estar relacionada con trastorno déficit de atención, por ejemplo. 

Dentro de nuestra familia aprendemos estereotipos sociales conforme crecemos que son importantes como el color de la piel, del pelo, el peso ideal, etc. Cuando nos damos cuenta de que nos faltan estas características, empezamos a desear algo que no tenemos y constantemente queremos llegar a ser como alguien más, por lo que siempre estamos en carencia y esto nos lleva a pugnar solamente por la belleza de las modelos o de las ideas que los medios de comunicación fomentan, lo cual es muy distinto a pugnar por la salud y el bienestar. 

Existen varios factores que pueden ser causa de los trastornos alimenticios, entre los que destacan los psicológicos que comienzan generalmente con una baja autoestima: sentir que no se es suficiente o que no tiene control de su vida, tener depresión, ansiedad, dificultad para relacionarse o para expresar sus sentimientos, antecedentes de abuso, todo aunado a la presión social de la cultura de la belleza que solamente acepta delgadez y altura en las mujeres o musculatura con cierta complexión física en el caso de los hombres, piel clara, etc.

Para tratar estos trastornos, si se está dentro de una situación de mucha adversidad y solamente se brinda medicamento como tratamiento, sería como tener la mano en el fuego y ponerse pomada como único remedio pero sin quitar la mano del fuego. Los conflictos se tienen que tratar desde la raíz por lo que el tratamiento con medicamento se debe complementar con una psicoterapia para lograr resultados exitosos.  

 

La mejor herencia para los hijos es la autoestima.