El mayor desafío en el tratamiento de la anorexia nerviosa es ayudarle a la persona a reconocer que tiene una enfermedad. En la mayoría de los casos, las personas que padecen este trastorno niegan tener esta enfermedad y sólo acceden al tratamiento ya que los ha afectado gravemente.
Una vez que ingresan, el paciente debe recuperar el peso corporal normal y trabajar para estabilizar sus hábitos alimentarios. Esto se logra cone l aumento de 2 a 5 kilogramos semanales.

Fuente: nlm.nih.gov

Imagen: bwell.go2.ie

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